Recetas con mucho calabacin

Recetas con mucho calabacin

Recetas sabrosas con calabacín

De todas las verduras, los calabacines entran en la categoría de las más bajas en calorías y son adecuados para cualquier dieta. Descubramos cómo cocinar calabacines y algunas ideas sencillas para utilizarlos en la cocina.

Sin embargo, en caso de que te encuentres con este problema, puedes probar a salar los calabacines crudos en rodajas para purgar parte del agua vegetal. A continuación, se enjuagan, se secan y se procede a la cocción.

Puedes asarlas, hervirlas, freírlas en la sartén y hacer una guarnición ligera sola o junto con otras verduras. Al ser un alimento típico del clima cálido, se pueden combinar con pimientos, berenjenas, tomates, pero también con las siempre presentes zanahorias y patatas. Pueden ser un excelente condimento para los primeros platos, tanto en los risottos como en la pasta, y también en las cremas.

Además, una vez hervidas y ahuecadas, pueden rellenarse con cualquier tipo de relleno: carne, queso o incluso sólo verduras. Si se cortan alargadas y se asan, pueden ser las protagonistas de una versión alternativa de la berenjena a la parmesana, o pueden acompañar otros platos como la piadina.

  Recetas con calabacin redondo

Recetas de calabacines al horno

¡Me encantan las recetas con calabacines! En este artículo te ofrezco una recopilación de ideas en parte diferentes a las que puedes encontrar en la red, todas para cocinar en familia. ¿Son recetas ligeras? Lo único que puedo decir es que son buenas recetas, no demasiado elaboradas y, por tanto, saludables. Algunos implican freír, otros cocinar en el gas o en el horno.

Soy una mujer ocupada a la que le encanta cocinar y hace años que hago este plato de espaguetis con atún y calabacines. Se puede hacer en menos de 30 minutos y se obtiene un plato único completo de hidratos de carbono, grasas, proteínas y verduras.

Recetas con calabacines para la cena

Rápidas, fáciles y baratas: las recetas con calabacines suelen ser ideales para los fines de semana de verano, o para una velada con amigos, incluso con los niños. A estas alturas se pueden encontrar en los supermercados o en los mostradores de verduras durante todo el año, pero la mejor época para consumirlas sigue siendo el verano. Su sabor combina de maravilla con otros productos de temporada y su preparación nunca supone un esfuerzo excesivo.

Los calabacines son buenos para ti porque son ricos en agua y tienen un bajo aporte calórico. También contienen vitaminas A y C, ayudan en casos de inflamación urinaria, problemas renales, regulan los intestinos y son adecuadas en dietas para diabéticos y enfermos del corazón. Pero no sólo eso, sino que también son (en su mayoría) deliciosos: ¡vamos a ver algunas sabrosas recetas con calabacines!

  Receta quinoa con pollo y calabacín

Para prepararlo, comience por cortar las cebollas en aros finos. A continuación, se doran bien en una sartén antes de añadir los calabacines y se cocinan durante unos diez minutos. Mientras tanto, batir 2 huevos con queso rallado, sal y pimienta al gusto. Verter la mezcla de huevo batido en la sartén y cocinar hasta que se dore por ambos lados.

Treinta recetas con calabacines

¿Te has preguntado alguna vez cómo congelar calabacines? En unos sencillos pasos podrá saber cómo conservar los calabacines para el invierno y disponer de ellos para la preparación de muchos platos típicos del verano.

Una vez que los calabacines hayan empezado a congelarse, puedes sacarlos de la bandeja y colocarlos en una bolsa para alimentos. De este modo, no se convertirán en un solo bloque, sino que los cubos individuales se mantendrán bien separados unos de otros.

  Recetas de albondigas de calabacin

Si lo prefiere, también puede omitir la cocción en agua hirviendo y congelar sus cubos de calabacín crudos. Asegúrate de colocarlos primero en una bandeja, congelarlos durante un tiempo y luego meterlos en una bolsa.

Otro método de conservación consiste en conservar los calabacines en aceite. Hay que cocerlos y luego colocarlos en un recipiente, cubriéndolos completamente con aceite de oliva virgen extra.

Puedes asar primero los calabacines y luego colocarlos en una bandeja. Déjelos en el congelador durante una hora aproximadamente y, en cuanto hayan empezado a congelarse, puede pasarlos a una bolsa de congelación.

Esta web utiliza cookies propias para su correcto funcionamiento. Al hacer clic en el botón Aceptar, acepta el uso de estas tecnologías y el procesamiento de tus datos para estos propósitos. Más información
Privacidad